Pieza del mes de junio de 2024: La física cómo disciplina científica en la educación secundaria: La brújula de inclinación y declinación magnética.

El presente mes el Museo Pedagógico Colombiano destacará como pieza del mes la Brújula de Inclinación y Declinación Magnética que pertenece a la colección de implementos escolares de la Educación Secundaria, en relación con la enseñanza de la geografía y las ciencias en el ramo de la física. Elemento fabricado aproximadamente a mediados de la década de 1920, por la compañía alemana E. Leybold’s Nachfolger A.G. ubicada en la ciudad de Colonia.

Leybold hace referencia al apellido homónimo del comerciante alemán Ernst Leybold (1824-1907) que en calidad de gerente de la empresa Kothe, en 1851 asumió financieramente los rumbos de esta, y finalmente se hizo cargo desde 1863 bajo el nombre de E. Leybold. En 1870 la empresa fue vendida, pero siguió operando como E. Leybold’s Nachfolger.

Logo de E. Leybold’s Nachfolger. (ca. 1939). Catálogo de Aparatos de Física de Leybold. Fuente: https://libros.unlp.edu.ar/index.php/unlp/catalog/view/26/11/10925-1

La compañía, comenzó como un negocio de ventas e importación de cristalería médica, envases de ungüentos, termómetros, balanzas, suministros y equipamientos para farmacias; posteriormente desde 1854, amplió la gama de productos con equipos físicos-técnicos, farmacéuticos, químicos, y otras disciplinas científicas. De tal manera, a finales de 1850 no solo ofrecía un catálogo completo de productos, sino que garantizaban la fabricación de cualquier equipo farmacéutico, químico, físico, matemático y técnico que no hiciera parte del catálogo siguiendo las especificaciones del diseño.

Tal fue el éxito de la empresa, que, en 1867 Leybold decidió crear su propia fábrica de equipos científicos, técnicos y didácticos. Consolidándose también, como uno de los principales proveedores de instrumentos para laboratorio en escuelas, universidades y centros de estudios de Alemania.

Según los hitos históricos oficiales del fabricante en 1871, la variedad de productos incluía 585 equipos físicos y armarios de instrumentos de física, compuestos por colecciones completas de equipos que se ofrecieron por primera vez desde entonces. Para 1876 Leybold, publicó el primer catálogo de equipos físicos para el uso en escuelas secundarias e institutos; gradualmente se incluyeron aparatos químicos para laboratorio.

Luego en 1880 le siguió un folleto especial sobre el trabajo de William Crookes, quién a partir de experimentos con tubos de rayos catódicos contribuyó al desarrollo de las bombas de vacío, cuyo éxito tecnológico inició en 1906. Las innovaciones en el campo fueron tan relevantes qué posteriormente, le siguió la invención de la bomba de aire molecular, el principio básico de la bomba turbo-molecular y el uso de la bomba de difusión.

Sede de E. Leybold’s Nachfolger en Colonia. (ca. 1939). Catálogo de Aparatos de Física de Leybold. Fuente: https://libros.unlp.edu.ar/index.php/unlp/catalog/view/26/11/10925-1

De acuerdo con la introducción del ‘Catálogo de Aparatos de Física’:

Al comparar este catálogo con las ediciones precedentes se nota fácilmente que muchos aparatos han sido perfeccionados y que hemos creado muchos nuevos. Hemos, al contrario, suprimido todos aquellos que no presentan sino un interés histórico o que no se prestan para una enseñanza viva. Nos hemos esforzado en realizar aparatos de construcción simple; pero que a la vez pueden ser utilizados para numerosas experiencias. Los modernos aparatos Leybold hacen la enseñanza más fácil, y por el mismo gasto, permiten aplicaciones múltiples en dominios muy amplios. Algunos aparatos, cuya adquisición puede ser hecha progresivamente, constituyen el objeto de combinaciones racionales juiciosamente establecidas. Estamos a la entera disposición de nuestros favorecedores para completar las indicaciones del presente catálogo.” (Leybold’s Nachfolger, 1939).

Brújula de Inclinación. El mundo físico: gravedad, gravitación, luz, calor, electricidad, magnetismo, etc. / A. Guillemin. – Barcelona Montaner y Simón, 1882. Fuente: Fondo Antiguo de la Biblioteca de la Universidad de Sevilla, España.

La brújula de inclinación y declinación también conocida como compás magnético, es un instrumento que permite estudiar las propiedades del campo magnético en cada punto de la superficie de nuestro planeta. Asimismo, permite establecer el sentido de orientación, posición y navegación basado en las líneas magnéticas que existen en la Tierra, ya que, el campo magnético genera la indicación precisa. Además, se utilizaba para determinar los puntos cardinales y el meridiano magnético.

Es importante precisar que la inclinación magnética se presenta por el ángulo que forma el campo magnético terrestre con el plano horizontal de la superficie de la tierra y es resultado de la tendencia que tienen los objetos imantados a alinearse con las líneas generadas por el campo magnético.

La historia de la brújula de inclinación está ligada directamente a la navegación y a los descubrimientos desarrollados por la necesidad de orientarse en condiciones de adversidad. Uno de los hitos principales para la invención de la brújula de inclinación fue la expedición polar del navegante y botánico británico James Clark Ross (1800-1862) en 1831 en la que localizó la posición del Polo Norte Magnético. Ross utilizó un instrumento llamado Dip-circle (Círculo de inclinación) para medir la inclinación del campo magnético en las regiones polares, el procedimiento ayudó a establecer una relación entre la inclinación magnética y la latitud geográfica.

A medida que avanzó el siglo XIX, los progresos y estudios científicos sobre el campo magnético contribuyeron a una mejor comprensión del lugar que habitamos. De esta forma, en 1838 el matemático, astrónomo y físico alemán Carl Gauss (1777-1855) propuso la teoría de un dipolo magnético, descrito como:

“[…] un sistema compuesto por dos polos magnéticos iguales y opuestos (polo norte magnético y polo sur magnético) separados por una distancia finita. Este sistema presenta una estructura fundamental que ayuda a entender las propiedades magnéticas en la naturaleza”. (¿Qué es un dipolo magnético?, 2024)

Posterior a dichos descubrimientos en relación con el magnetismo, la brújula de inclinación y declinación como instrumento fue evolucionando. El artefacto está conformado por dos agujas imantadas, que se apoyan sobre una pieza fabricada con centro de ágata (una variedad de mineral de roca volcánica) que permite su deslizamiento. La aguja vertical indica la inclinación magnética de un lugar específico, mientras que la horizontal indica la dirección de los polos magnéticos terrestres.

El estudio del campo magnético terrestre se benefició significativamente de la brújula de inclinación. El dispositivo posibilitó mediciones precisas de la inclinación magnética en diversas ubicaciones y latitudes, arrojando luz sobre la generación y comportamiento del campo magnético de nuestro planeta, que tiene como función principal protegernos contra los impactos masivos de energía; los efectos de las tormentas solares; y la radiación de otros cuerpos celestes. Es decir, funciona como un escudo natural, que hace a nuestro planeta apto para la vida.

Junto con los aportes en la rama física del magnetismo, el instrumento también ha sido de suma importancia en otras áreas. En la navegación, ha contribuido a viajes marítimos más seguros y precisos, ya que, los marinos han podido determinar su posición en alta mar calculando la latitud magnética mediante la medición de la inclinación del campo magnético terrestre con respecto a la superficie de la Tierra.

Para la exploración de las regiones polares, ha permitido mediciones precisas del campo magnético en latitudes próximas a los polos, mejorando la comprensión de la geografía magnética polar y una navegación más precisa en entornos desafiantes.

Finalmente, en el campo de la geofísica y la geología, se ha utilizado para realizar mediciones detalladas del campo magnético en distintas ubicaciones, estas mediciones son esenciales para entender la estructura interna de la Tierra y estudiar fenómenos geológicos como la tectónica de placas y la formación de minerales.

Para conocer la Brújula de Inclinación y Declinación E. Leybold’s Nachfolger A.G., otros objetos en relación con la enseñanza de la geografía; otros objetos e implementos escolares de la historia, memoria escolar, y la práctica educativa y pedagógica; la colección de juegos y juguetes; y los archivos pertenecientes a los fondos documentales y bibliográficos que salvaguardamos y exhibimos en el Museo Pedagógico Colombiano, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m. en las instalaciones del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

Igualmente los invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales de Facebook: https://www.facebook.com/museopedagogicocolombiano/, Instagram: https://www.instagram.com/museopedagogicoupn/?hl=es, y a explorar nuestra página web: http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/ para visualizar y compartir nuestros contenidos.

 

Palabras Clave: Brújula de inclinación y declinación; Navegación; Orientación; Geografía; E. Leybold’s Nachfolger; Magnetismo; Pedagogía; Enseñanza; Implementos Escolares; Museo Pedagógico Colombiano.

 

Autoría: Erika Liliana Guerra Forero – Estudiante de la Licenciatura en Educación Básica con énfasis en Ciencias Sociales.
Revisión y corrección de estilo:  Museo Pedagógico Colombiano.

 

Referencias:

Leybold.com (2020). Leybold, Pioneers For 170 Years. Fuente: https://www.leybold.com/content/dam/brands/leybold/web-only/about-leybold/Leybold-170years.pdf

heraldo.es (2019). Los pioneros de la moderna tecnología de vacío. Fuente: https://www.heraldo.es/noticias/sociedad/2019/06/26/los-pioneros-de-la-moderna-tecnologia-de-vacio-aquellos-maravillosos-inventores-wolfgang-gaede-y-la-compania-e-leybold-nachfolger-1322215.html

Leybold.com (2020). Leybold, Pioneers For 170 Years. Fuente: https://www.leybold.com/es/about-us/history/our-founders

Leybold.com (2020). Nuestra Historia – Hitos. Fuente: https://www.leybold.com/es/about-us/history/milestones

Colegioinmaculada.es (2010). Piezas selectas – Brújula de inclinación. Fuente: https://www.colegioinmaculada.es/Laboratorio/Brujul.htm

electricity-magnetism.org (2024. ¿Qué es un dipolo magnético? Fuente: https://www.electricity-magnetism.org/es/que-es-un-dipolo-magnetico/

museo.uaz.edu.mx (s. f.). Brújula de Inclinación. Fuente: https://museo.uaz.edu.mx/portfolio/brujula-de-inclinacion

ports.tech. (2023). La Historia y Evolución de las Brújulas: Navegando a Través del Tiempo. Fuente: https://www.ports.tech/post/historia-y-evolucion-brujulas

suunto.com.  (2024). Comprendiendo las zonas en equilibrio. Fuente: https://www.suunto.com/es-co/Asistencia/Compasses-feature-index/Comprendiendo-las-zonas-en-equilibrio/

 

Pieza del mes de febrero de 2024: Guías para el Maestro, aportes de la Tercera Misión Pedagógica Alemana en Colombia

Como pieza del mes, haremos reconocimiento a los aportes de la Tercera Misión Pedagógica Alemana en Colombia, a partir de las Guías para el Maestro diseñadas para los diferentes grados de la educación primaria, Misión desarrollada durante las décadas de 1960 y 1970, donde un grupo de expertos alemanes asesoró al Gobierno Nacional en la implementación de reformas educativas con el propósito de dar cumplimiento a los Decretos 1710 y 1955 de 1963 mediante los cuales se adoptaron disposiciones y estrategias para el mejoramiento del sistema educativo en el nivel de básica primaria; y se organizó la educación normalista. En ese sentido, el 1710 fijó cinco grados de escolaridad para todas las escuelas, modificando el plan de estudios vigente desde 1950; mientras que, por medio del 1955, se acentuó la profesionalización de la Escuela Normal a través del estudio de las ciencias y las técnicas pedagógicas y psicológicas.

En el periodo de tiempo referenciado, el profesor Walter Kaessmann (Asesor del Ministerio de Educación Nacional –MEN– y posteriormente director de la Misión), adelantó un diagnóstico del estado de la educación primaria cuyos resultados fueron el marco de referencia para las propuestas y acciones de la Misión, puesto que, los análisis reflejaban la baja asimilación de conocimientos por parte de los estudiantes, altos índices de deserción y repitencia escolar, escasez de recursos técnicos, y carencia de los materiales mínimos de enseñanza en las escuelas.

Parte de la raíz de los problemas se centraba en la falta de preparación académica del magisterio. En consecuencia, de este panorama en 1965 inició la intervención de los expertos de la República Federal de Alemania para el “desarrollo de la enseñanza primaria en la República de Colombia, mediante medidas de reforma en los sectores del perfeccionamiento del profesorado, de la organización práctica de la enseñanza y de los medios de enseñanza” (De Ferro, 1982). El convenio se ejecutó por medio de la elaboración de guías para el desarrollo de nuevos planes de estudio; la elaboración de material didáctico para apoyar al maestro en su práctica de enseñanza; y la capacitación permanente en el uso de las guías y los materiales didácticos elaborados.

Es decir, la Misión llevó a cabo una transformación sustancial de la educación primaria acompañando los diferentes procesos de capacitación de los maestros colombianos y de una fuerte inversión para el desarrollo de soportes didácticos que facilitaron la acción del docente en el aula, en este sentido, se proporcionó al maestro de instrumentos didácticos y se diseñaron lineamientos metodológicos para orientar y guiar su labor.

Con ese propósito, los asesores alemanes junto con el Ministerio de Educación Nacional, iniciaron en 1969 la publicación de las primeras “Guías para el Maestro de 1o. a 3er. grado”, una colección de tres volúmenes denominados: “Parcelación, Desarrollo y Anexo”, el primero daba una visión secuencial y sintética de los temas correspondientes a la enseñanza global y a la enseñanza sistemática por áreas, a tratar semanalmente; el segundo presentaba las actividades para desarrollar los temas de la enseñanza global, de acuerdo con la parcelación; mientras que, los anexos ampliaban los contenidos, presentaban las indicaciones metodológicas, e incluían indicaciones didácticas para todas las áreas de estudio. Para los cursos 4o. y 5o. grado cada guía desarrollaba un área o asignatura en particular. El objetivo de las Guías fue dotar al maestro “de un instrumento que le permitiera desarrollar el programa del curso indicándole la metodología para su enseñanza y sugiriéndole actividades prácticas complementarias, con el fin de alcanzar la deseada mejora cualitativa del proceso enseñanza-aprendizaje” (De Ferro, 1982).

De acuerdo con Martínez Boom: “Las Guías introducen el mecanismo de la planificación de la enseñanza como la solución más adecuada para obviar la deficiente preparación del magisterio, planeando la enseñanza, es decir, parcelando los contenidos de acuerdo con unos temas generales, definiendo objetivos generales y específicos, determinando el conjunto de actividades y recursos necesarios para el desarrollo de los temas y el logro de los objetivos y por último, evaluando permanentemente, no solo se buscaba garantizar la uniformidad de los contenidos en todas las escuela del país (propósito primordial del Decreto 1710 del 63), sino que, y como punto fundamental, se ponía en funcionamiento un modelo uniforme para el desarrollo de tales contenidos” (Martínez, A., Noguera, C., Castro, J., 1982).

Con este modelo, apostar por la planificación de la enseñanza tendría importantes repercusiones para la labor del maestro en nuestro país. De tal manera, las prácticas escolares no se podrían pensar por fuera de los métodos de la planificación, que se constituyó como eje articulador. A partir de ese momento la definición de los planes y programas de estudio para la práctica del maestro la realizarían expertos; así, se introdujo la parcelación que estableció procedimientos uniformes para tecnificar el quehacer del maestro y los procedimientos de enseñanza. A través de dicha tecnificación, las guías se convirtieron en el manual del maestro, en ellas encontraría los elementos necesarios para la práctica pedagógica, de esta forma, se enlazó el saber del maestro a la guía.

Para tener en cuenta, con el esquema temas-objetivos-contenidos-actividades-recursos-evaluación se parceló la enseñanza y de acuerdo con las guías, sus objetivos, “deben estar encaminados a obtener en el alumno cambios de conducta, desarrollo de habilidades y destrezas, y adquisición de conocimientos” (MEN-MPA, 1975); en este sentido, las actividades de aprendizaje realizadas por el maestro estaban orientadas al logro de los objetivos operacionales propuestos, quién para alcanzarlos, también se apoyaría en los recursos y materiales didácticos; finalmente, con la evaluación se comprobaría el logro de los objetivos, ya que, “ofrece una manera de apreciación sistemática del rendimiento de los alumnos, teniendo en cuenta el conocimiento, la habilidad y la comprensión, con el mínimo de subjetividad y el máximo de seguridad” (MEN-MPA, 1975). Por último, nociones de las prácticas administrativas y productivas (objetividad, confiabilidad, efectividad y eficacia) se aplicaron en los discursos educativos. De este modo, las guías de la Misión pedagógica alemana, transformaron la educación y la enseñanza en las escuelas primarias, apropiando y adecuando un conjunto de prácticas novedosas que se articularon a las ‘viejas prácticas’.

Al respecto, para comprender el aporte de aquellos textos desarrollados por el Grupo de Programación e Inspección Nacional de la Enseñanza Elemental con la Asesoría de la Misión Alemana, en la introducción de la “Guía para el Maestro, primer grado de Enseñanza Primaria – Parcelación” editada en 1975, se enunciaba que: “Esta guía tiene por objeto mejorar la calidad de la enseñanza, ofreciendo a los maestros un recurso didáctico que les ayude a desarrollar en forma más funcional el programa del primer grado de enseñanza” (MEN-MPA, 1975). Igualmente, en la Guía de segundo grado, se manifestaba que, “Un buen maestro es el que orienta toda su labor atenido a una “Guía de Trabajo” bien concebida y adaptada […] La GUÍA muestra el camino de todas las materias en forma correlacionada, adecuada al grado respectivo” (MEN-MPA, 1970).

En conclusión, con la propuesta metodológica de las Guías y la planificación de la enseñanza, los expertos alemanes buscaban consolidar un modelo para estructurar y transformar la práctica de enseñanza del maestro. Acción que instauró la primera forma de dirección y control sistemático para la enseñanza de los maestros colombianos; por otra parte, fue claro el enfoque didáctico que tuvo la Misión, que, además, le concedió al maestro cierto papel significativo en el proceso, pues los materiales en sí mismos no tenían ningún sentido y que, para mejorar la enseñanza era fundamental “la compresión que el maestro tuviera del material y su uso efectivo en el aula de clases” (De Ferro, 1982). Entonces, la reforma y mejora cualitativa de la enseñanza primaria no hubiera sido posible sin la habilidad del maestro para utilizar el material didáctico, y por supuesto, sin la compresión y apropiación de las guías reseñadas.

A propósito de los alcances de las Guías, se destacan algunos apartados sobre las proyeccionnes que se tenían con ellas:

El Ministerio de Educación no ha vacilado en continuar ofreciendo a los maestros, recios soldados del progreso, estas GUÍAS como la mejor ayuda en su ponderosa tarea de formar, educar o instruir a las jóvenes generaciones que son la patria misma en flor de humanidad esperanzada” (MEN-MPA, 1970).

Ahora más que nunca, el éxito de este manual depende de la constante labor del maestro encargado de aplicarlo. El Gobierno Nacional confía en el buen suceso de esta tarea como en un valioso medio para la redistribución de las fuentes del conocimiento y, por ende, de las oportunidades de progreso en los órdenes social y económico” (MEN-MPA, 1972).

Como datos estadísticos relevantes de los esfuerzos conjuntos del MEN y de la Misión, un apartado especial para destacar fue la producción de materiales didácticos producidos entre 1970-1978. Según análisis elaborados por sus miembros, “lo más urgente y aquello en que se podía realizar una labor más eficaz en beneficio de la educación primaria, era la producción de materiales que ayudaran al maestro y al alumno en el mejoramiento del acto de enseñanza-aprendizaje” (De Ferro, 1982). Así pues, además de la edición de más de 280.000 ejemplares de las guías, se publicaron más de cuatro millones de cartillas para el área de matemáticas, cerca de dos millones y medio de cartillas de lectura, más de 150.000 textos para música, cerca de 78.000 textos para manualidades, alrededor de 175.000 para educación física, y 10.000 sobre geografía. Se distribuyeron más de 15.000 ficheros e innumerable cantidad de sellos, juegos didácticos, aparatos de gimnasia, mapas, instrumentos musicales, discos, láminas de biología, frisos de historia, globos terráqueos, etc., como también más de dieciséis millones de cuadernos y más de veintiún millones de lápices.

Para conocer y consultar la colección de Guías para el Maestro, otros documentos en relación con las misiones pedagógicas alemanas; textos, manuales escolares y de alfabetización y demás archivos pertenecientes a los fondos documentales; y también los objetos e implementos escolares de la historia, memoria y la práctica educativa y pedagógica que salvaguardamos y exhibimos en el Museo Pedagógico Colombiano, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m. en las instalaciones del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

 

Palabras clave: Guías para el Maestro; Planificación de la Enseñanza; Parcelación; Ministerio de Educación Nacional; Educación Primaria; Enseñanza; Tercera Misión Pedagógica Alemana; Maestros; Museo Pedagógico Colombiano.

 

Referencias:

Martínez, A., Noguera, C. y Castro, J. (1988). Reformas de la enseñanza en Colombia: 1960–1980. Del énfasis didáctico al énfasis curricular. Educación y Cultura, (15), 12–21.

Páez Vanegas, L. (2016). El libro de texto escolar y la tercera misión pedagógica alemana. Aportes a los procesos de enseñanza desde el diseño editorial en Colombia. Tesis presentada como requisito para optar al título de Magister en Educación, Universidad Nacional de Colombia.

Cárdenas, A. P. (2011). Las contradicciones de los sistemas de gestión de calidad: entre la estandarización y la innovación pedagógica. Capítulo 5: Componente pedagógico. Bogotá: Universidad Santo Tomás. 

Rojas de Ferro, M. C. (1982). Análisis de una Experiencia: La Misión Pedagógica Alemana. Investigación, Universidad Pedagógica Nacional, Centro de Investigaciones, Bogotá.

MEN-MPA. (1970). Guía para el maestro, segundo grado de enseñanza primaria, Parcelación, 1a. Edición, Bogotá.

MEN-MPA. (1972). Guía para el maestro, tercer grado de enseñanza primaria, Parcelación, 1a. Edición, Bogotá.

MEN-MPA. (1975). Guía para el maestro, primer grado de enseñanza primaria, Anexo, 5ta. Edición, Bogotá.

Ramírez, D. (1978). La Misión Pedagógica Alemana ante el Ministerio de Educación de Colombia. Bogotá.

Pieza del mes de mayo de 2023: Spelling and Counting Board

Durante este mes, contribuyendo con el firme compromiso del Museo Pedagógico Colombiano, por la conservación material e historiográfica de objetos creados con un fin educativo, se dedicará especial atención al Spelling and Counting Board que traducido al español significa Tablero de ortografía y conteo; por tanto, se reseñará este artefacto, de acuerdo con su estructura, componentes materiales, funcionamiento, uso, y por supuesto, su historia internacional y nacional.

Copete, H. (2023). Superficie frontal del Spelling and Counting Board. [Fotografía]. Fuente: Museo Pedagógico Colombiano.
 

El Spelling and Counting Board, es un tablero de madera geométricamente atractivo, con forma de circunferencia, sobre el que se encuentran ejemplos de ilustraciones y algunas palabras que se pueden conformar, ya que, su función es la construcción de vocablos por medio del desplazamiento de pequeños cuadrados móviles marcados cada uno por las letras del abecedario. Los términos constituidos se ubican al interior del tablero en medio de dos líneas paralelas; pero no es su única función, en su reverso los cuadrados insertos están marcados con los números del 0 al 9 y los signos de suma, resta, multiplicación, división e igual, con el fin de realizar operaciones aritméticas básicas.

Copete, H. (2023). Superficie posterior del Spelling and Counting Board. [Fotografía]. Fuente: Museo Pedagógico Colombiano.

Acorde con su descripción, era un dispositivo poco convencional para practicar la ortografía y desarrollar operaciones matemáticas, y aunque no requería la utilización de lápiz y papel, es una herramienta con la que no era posible organizar palabras extensas o con muchas vocales (debido a que no tenía suficientes letras), y tampoco efectuar cálculos matemáticos avanzados, por lo tanto, se trata de objeto utilizado para los niveles iniciales de enseñanza de las letras y los números.

La fabricación de este tipo de tableros circulares inició alrededor de los años 1940 en los Estados Unidos, y su uso tuvo vigencia hasta 1960, y con frecuencia se trabajaba con este dentro del aula escolar. La enseñanza de la lectura vigente a finales del siglo XIX e inicios del siglo XX en nuestro país, dirigió su estrategia mediante dos vías: el método fonético de lectoescritura, y el del significado. Con el primero se hacía reconocimiento del sonido producido por las letras y sus distintas combinaciones; y a partir del segundo se enseñaban palabras completas, es decir, más que prestar atención al sonido, este se enfocó en cómo se ve y que representa una expresión escrita en el mundo tangible. Para el caso de nuestra pieza del mes, es fundamental la función que desempeñó en el contexto escolar y su aporte educativo en dos vías: la del método fonético para la enseñanza progresiva de la lectura y la escritura conforme a las respectivas normas ortográficas; y, la matemática que apuntó a la práctica de las cuatro operaciones aritméticas, la comprensión tanto de la forma y cantidades de los diez dígitos (números del 0 al 9) y símbolos de cada operación, como también su significado en dicho proceso.

En el caso colombiano no es exacto el momento en que dicho artefacto llegó e inició a hacer parte de la enseñanza a nivel básico. Sin embargo el fabricante del ejemplar que exhibimos, fue la empresa colombiana PRODEMA LTDA. con sede en Bogotá, encargada también de su distribución a nivel nacional. A pesar que el Museo resguarda el material junto con la caja original que lleva el nombre de este dispositivo y algunas ilustraciones, no hay información precisa sobre la trayectoria comercial de la empresa. Sin embargo, es clave reconocer cuál era su función y definir en qué momento de la historia de la educación colombiana se introdujo.

Copete, H. (2023). Caja de cartón del Spelling and Counting Board (obsérvese el detalle sobre el nombre y marca del fabricante). [Fotografía]. Fuente: Museo Pedagógico Colombiano.

Principalmente, la tradición anglosajona dedicada a la formulación del Currículum (Currículo), estableció las bases para la comprensión y posterior creación de “herramientas” eficaces para el aprendizaje, puesto que su propósito principal fue la organización de objetivos y su respectiva evaluación, brindando de manera exacta y eficaz particulares resultados. Bajo este modo de comprensión, la educación tiene efectos concretos y visibles en determinados periodos de tiempo, al respecto: saber leer, contar y escribir en niveles o edades específicas; lo anterior sugiere, la correlación con el movimiento ‘escolanovistaen el país, que abrió paso al reconocimiento de la psicología como principal disciplina dedicada a la investigación, experimentación e interpretación del fenómeno educativo, que comprendería también modelos como el conductismo y el constructivismo; y asimismo, la orientación de la relación alumno-maestro centrando su atención sobre el estudiante. 

Concretamente, la conexión entre la Escuela Activa y el Currículo, con la creación y empleo de este objeto se comprende por la preocupación constante -según la propuesta de la pedagogía activa- en mantener la atención del niño, su interés y estímulo motriz mediante la manipulación de materiales diseñados al alcance de sus fuerzas físicas y tamaño, aspectos primordiales que condujeron a la creación de materiales didácticos que apoyaban el control del ambiente, y guiaban la experiencia sensorial y la educación del niño/alumno. Por otra parte, en el caso colombiano, la reforma curricular asesorada por la Tercera Misión Pedagógica Alemana (1965-1978) brindó ciertas características importantes, al respecto destacan Martínez Boom y otros:

“[…] los objetivos constituyen el eje de la planificación de la enseñanza y de la práctica del maestro; las actividades que realice este, denominadas “actividades de aprendizaje”, deben estar orientadas al “logro de los objetivos propuestos” y en ello colaboraràn los recursos y materiales didácticos […]” (Boom Et Al, 2003, 66-67).

De manera que, llevar a la práctica educativa y escolar un material didáctico como el Tablero de ortografía y conteo en Colombia, no es mera casualidad, al contrario, proviene de una comprensión analítica y sistemática de la educación; de tal relación es posible aseverar que esta pieza de nuestra colección para el mes de mayo en el Museo, es resultado de la llegada de la Tercera Misión Pedagógica Alemana. Es decir, a lo largo de los años 60 y 80, este artefacto circuló por las aulas escolares como un elemento de naturaleza didáctica, con el fin de alcanzar resultados de aprendizaje, adquirir conocimientos y cumplir objetivos.

Para conocer el Spelling and Counting Board, otros objetos e implementos escolares de la historia, la memoria y la práctica educativa y pedagógica, la colección de juegos y juguetes; y los archivos, textos y manuales pertenecientes a los fondos documentales y bibliográficos que salvaguardamos y exhibimos en el Museo Pedagógico Colombiano, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m. en las instalaciones del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

Igualmente los invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales de Facebook: https://www.facebook.com/museopedagogicocolombiano/, Instagram: https://www.instagram.com/museopedagogicoupn/?hl=es, y a explorar nuestra página web: http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/ para visualizar y compartir nuestros contenidos.

 

Palabras Clave: Tablero de ortografía y conteo; Material didáctico; Lectura; Escritura; Aritmética; Prodema Ltda.; Infancia; Escuela Activa; Currículo; Tercera Misión Pedagógica Alemana; Museo Pedagógico Colombiano.

 

Autoría: Yeimy Jimena Bejarano Baquero – Estudiante del Programa en Pedagogía.
Revisión y corrección de estilo:  Museo Pedagógico Colombiano.

 

Referencias:

Boom et al. (2003). Currículo y Modernización. Cuatro décadas de educación en Colombia. Bogotá: Cooperativa editorial Magisterio.

Spelling and Counting Board. (s. f.). MUSEUM OF TEACHING AND LEARNING. https://www.motal.org/spelling-and-counting-board.html

Libro: Para una historia de la Universidad Pedagógica Nacional La lucha por lo superior

Estimados/as visitantes y lectores, compartimos el libro: «Para una historia de la Universidad Pedagógica Nacional. La lucha por lo superior«, escrito por el profesor Alejandro Álvarez, quien, a partir de la revisión de las las raíces de la Universidad Pedagógica Nacional en relación con la Segunda Misión Pedagógica Alemana (1924- 1926), nos exhorta a recuperar la memoria y apropiar su historia desde 1927.

«Desde la fundación del Instituto Pedagógico Nacional, a finales de la década de 1920, la Universidad Pedagógica Nacional ha atravesado por varios momentos representativos que han marcado hitos importantes en sus aportes a la formación de maestros en Colombia. Sin embargo, a pesar de su impacto en la educación, hasta la fecha no se ha escrito una historia completa que de cuenta de sus múltiple facetas y de sus ricos aportes a la pedagógica, la didáctica, la formación y la educación. Aunque existen menciones de su efecto transformador en diferentes publicaciones, no se ha consolidado un relato que narré su proceso como la institución formadora de maestros por excelencia. Este libro, sin pretender llenar este vacío, es un aporte a la memoria institucional del alma mater y ofrece un recorrido por las experiencias más significativas que han marcado hitos constitutivos de su identidad, en medio de su permanente resignificación. La presente obra invita al lector a conocer el tránsito que la Universidad Pedagógica Nacional ha hecho por cuatro momentos diferentes; además, ilustra cómo han surgido nuevos retos en la academia universitaria y se pregunta por lo que significa hoy formar maestros al nivel de lo superior». Tomado de: http://repositorio.pedagogica.edu.co/handle/20.500.12209/17254

En el siguiente enlace se puede consultar la publicación: Para una historia de la Universidad Pedagógica Nacional. La lucha por lo superior

Pieza audiovisual del mes de noviembre de 2022: «Exposición temporal: Año María Montessori UPN 2022»

En el marco de las actividades por la conmemoración del Año Montessori UPN 2022, organizado por los 70 años de su fallecimiento. Hemos producido la primera pieza del mes audiovisual del Museo Pedagógico Colombiano, dedicada a la exposición: «María Montessori: Infancia, ambiente, libertad, acción y vigencia. Conmemorando los 70 años de su fallecimiento desde el Museo Pedagógico Colombiano».

Para conocer la exposición temporal «María Montessori: Infancia, ambiente, libertad, acción y vigencia. Conmemorando los 70 años de su fallecimiento desde el Museo Pedagógico Colombiano», abierta hasta el 9 de diciembre, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m. en las instalaciones del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

Igualmente los invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales de Facebook: https://www.facebook.com/museopedagogicocolombiano/, Instagram: https://www.instagram.com/museopedagogicoupn/?hl=es, y a explorar nuestra página web: http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/ para visualizar y compartir nuestros contenidos.

 

Concepto Audiovisual: Alejandra Cacante – Estudiante de la Licenciatura en Educación Infantil.
Revisión y corrección de estilo:  Museo Pedagógico Colombiano.

 

Palabras clave: Año María Montessori; Ambiente; Material Didáctico; Escuela Activa; Infancia; Formación de Maestras; Museo Pedagógico Colombiano; Universidad Pedagógica Nacional.

Recepción de María Montessori en Colombia y América Latina

Estimados/as visitantes y lectores, en el marco de actividades académicas y culturales del Año María Montessori UPN, y la exposición temporal: «María Montessori: Infancia, ambiente, libertad, acción y vigencia. Conmemorando los 70 años de su fallecimiento desde el Museo Pedagógico Colombiano», difundimos y cordialmente los invitamos a escuchar el siguiente recurso de audio preparado por estudiantes practicantes del Museo Pedagógico Colombiano y el equipo de La Pedagógica Radio. El cual explora el proceso de recepción de las ideas y el método de María Montessori en diferentes escuelas establecidas en Latinoamérica y el territorio colombiano.

Pieza del mes de junio de 2022: Cajas de Husos Montessori.

En el marco de la conmemoración del Año Montessori UPN, hemos elegido como pieza del mes, la Caja de Husos de la colección de material didáctico Montessori del Museo Pedagógico Colombiano. Elemento donado al Museo en el año 2015, por la profesora Nelly Mendoza, que fue utilizado entre 1970 y 1980 en la sección de básica primaria del Instituto Pedagógico Nacional –IPN–. Sobre el cual (al igual que otros objetos de la colección de material Montessori de nuestro Museo), recientemente descubrimos que llegaron a Colombia como parte de los elementos traídos por recomendación del equipo de la Segunda Misión Pedagógica Alemana que vino a nuestro país entre 1924 y 1926, cuyo objetivo –como ya se ha establecido en diferentes publicaciones relacionadas– fue cambiar el rol de la mujer en la educación, guiar las labores académicas del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas y, por supuesto dotarlo con los recursos humanos, mobiliarios y demás herramientas necesarias para instalarlo y equiparlo con material didáctico y pedagógico traído directamente del extranjero.

Al respecto Franzisca Radke, señalaba:

En agosto [de 1927] habían llegado 250 bultos de Alemania y de
los Estados Unidos con útiles de enseñanza
” (Radke, 1936, p. 14).

Copete, H. (2022). Sello P. Johannes Müller Verlag für Schulhygiene. Buch- u. Lehrmittelverlag. [Fotografía]. Fuente: Museo Pedagógico Colombiano.

Como dato notable, después de examinar el conjunto de materiales Montessori que exhibimos en el Museo Pedagógico, y basados en el sello de fabricación estampado en la parte posterior de estos, identificamos su fabricante: la empresa alemana “P. Johannes Müller. Verlag für Schulhygiene. Buch- u. Lehrmittelverlag” (Editorial P. Johannes Müller para la higiene escolar. Editora de libros y material didáctico), localizada en el área de Charlottenburg en Berlín, la cual desde 1890 se dedicaba a la fabricación de mobiliario escolar y contaba con talleres para el diseño de equipamiento escolar, entre los que se destacaron algunas patentes y licencias de producción de bancos escolares, como el modelo Columbus (que recibió una medalla de oro en la Feria de Inventores de París de 1891); y el modelo Rettig, quizás el más exitoso y de uso masivo en Alemania, en virtud de tener espaldares individuales y un reposapiés elevado que permitía entrar y salir de forma más fácil, y ahorrar espacio.

Banco escolar, Modelo Rettig. [Fotografía]. Fuente: https://neutra.vs.de/en/more-about-vs/school-bench-successful-product/

Así, los trabajos de P. Johannes Müller & Co., fueron reconocidos en algunas exposiciones de diseño internacional, destacándose en 1911 por su participación en la exposición internacional Hygiene Exhibition de Dresde, donde recibió una medalla de oro al presentar un aula equipada con los ya referenciados bancos escolares Rettig; y también, en 1914, luego de presentar una habitación infantil modelo Montessori en la exposición German Werkbund de Colonia, con lo que se consolidó como el único fabricante y primer distribuidor de material Montessori en Alemania, recibiendo incluso el permiso directo de ella para la fabricación de sus mobiliarios y herramientas didácticas. De esta forma entre 1913 y 1935, la empresa, tuvo el derecho exclusivo de exponer, manufacturar y comercializar muebles y material didáctico Montessori en territorio alemán.

Habitación infantil Montessori apropiadamente equipada. [Fotografía]. Fuente: https://www.vs.de/media/timelines/features/montessori.zumkuckuck.com/vs_15578_98_1280_1.jpg

Folleto publicitario de 1914 para la exposición del Werkbund alemán en Colonia. P. Johannes Müller: único fabricante en Alemania de materiales Montessori. “Material didáctico alemán Montessori. Para la educación independiente en la primera infancia. Según los principios de la pedagogía científica de la Dra. M. Montessori”. [Imagen]. Fuente: http://www.vs-furniture.ae/media/cache/9e/ca/9ecaeb2f45cbfec319a9ba50ecba953f/vs_25866_02_1.jpg

 

“En 1932, el P. Johannes Müller presentó una sala equipada con materiales Montessori con motivo del Congreso de Educación Infantil en Berlín”. [Fotografía]. Fuente: https://www.vs.de/media/cache/62/91/6291d085377c5a4ff468fa8fffb95416/vs_25698_02.jpg

 

Por consiguiente, de acuerdo al rastreo histórico y la trayectoria de la empresa P. Johannes Müller, se presume que la llegada a Colombia de la Caja de Husos que hace parte de la colección del Museo Pedagógico sucedió a mediados de los años 30, y puntualmente después de 1934, año en que se abrió en el Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, el grado de Kindergarten en los locales de la nueva casa donde igualmente se alojaba la Escuela Montessori para niños de grado primero.

Como ya se ha señalado, la Caja de Husos que reseñamos, es una herramienta representativa del legado y trabajo realizado por María Tecla Artemisia Montessori (1870–1952), –que, en el año 2022 cumple 70 años de fallecida–, y quien, a partir de trabajos de psicología experimental y estudios médicos aplicados a niños denominados como “anormales”, fundamentó un método de enseñanza para todos los infantes, el cual se consolidó como un verdadero método pedagógico de vanguardia, fundamentado en tres principios:

El ambiente adecuado, el maestro humilde y el
material científico
” (Montessori, 1950, p. 15).

El Ambiente hacía referencia a un espacio adecuado para que el niño creciera y se descubriera a sí mismo en medio de su mundo; mientras que, los Maestros tenían la responsabilidad de conocer y respetar la personalidad de cada niño y su grado de desarrollo; y al mismo tiempo el Material, debía ser sensorialmente atractivo para que, por medio de su manipulación el niño, desarrollara distintas habilidades. Por ejemplo: desarrollo de los sentidos, desarrollo del lenguaje escrito y verbal, aptitudes en matemáticas, descubrimiento y comprensión del mundo, discriminación visual, motricidad, desarrollo de las relaciones sociales, vida cotidiana (higiene y cuidado de sí mismo), entre otras.

Se trataba entonces de un conjunto de materiales de enseñanza que correspondían a cinco áreas de aprendizaje: Sensorial, Matemáticas, Lenguaje, Cultura y Vida Práctica; además, recordemos que para Montessori el aprendizaje se obtenía a través de los sentidos, luego se transportaba hasta la mente y permanecía allí.

Así pues, en 1898, María Montessori conocería el manicomio de Roma, quedando sorprendida ante el despiadado trato que brindaban a los niños considerados como “retrasados”, “deficientes” o “idiotas”; posteriormente, visitaría otros barrios marginados y un reformatorio, donde nuevamente evidenció el abandono de los infantes. Situaciones que la motivaron a intervenir y transformar el proceso pedagógico de los niños, concluyendo que este debería estar fundamentado sobre el respeto y el amor, con relación a esto, mencionaba:

el niño es fuente de amor; cuando lo tocas, tocas el amor
(Montessori, 1948, La mente del Bambino).

Por tanto, el 6 de enero de 1907, abrió su primera escuela, la ‘Casa dei Bambini’, para niños de 3 a 6 años, donde asistieron niños de escasos recursos económicos, en su mayoría hijos de analfabetas. A través de aquella experiencia educativa, revolucionó los parámetros educativos existentes hasta esa época, situando a los Niños como los auténticos protagonistas del proceso educativo. Fue allí donde inició la revolución en la educación infantil; los inicios del siglo XX marcarían la transformación radical de las prácticas que se aplicaban en la Educación Infantil y, para tal proceso, su trabajo y los materiales que inventó fueron fundamentales.

Para ella, el niño era el protagonista de su propio aprendizaje, por lo que creó una serie de materiales con el propósito de fortalecer el carácter autónomo de la educación en ellos, dando un vuelco total a las escuelas y sus actividades, adaptando incluso los espacios del centro educativo a la medida de los niños, ya que el cambio correspondía a la escuela y sus métodos, no a los niños. Poner la Escuela al alcance y al tamaño del Niño, significó que esta se adaptara al mundo infantil, y desde ese momento la infancia se convirtió en el centro del sistema escolar.

De la experiencia sobre dichos objetos en las Casas dei Bambini, resaltaba:

[…] hice fabricar un material científico exactamente igual al que yo usaba en una institución de niños con discapacidad mental, el cual por haber sido utilizado para ese objeto
nadie pensó que pudiera llegar a ser un material escolar
” (Montessori, 1907, p.1).

En ese orden de ideas, nuestra pieza del mes pertenece al área de Matemáticas, la cual busca desarrollar el reconocimiento de números y cantidades; y cuyos materiales didácticos, tienen diferentes grados de dificultad a las que el niño accede progresivamente a medida que adquiere habilidades.

«Los objetos matemáticos no están dispersos en el ambiente como los árboles, las flores o los animales. Por ello, en la edad infantil no hay ocasión de desarrollar espontáneamente la mente matemática, lo que determina un obstáculo para el posterior desarrollo mental. Por esto a los materiales sensoriales los llamamos abstracciones materializadas
(Montessori, 1949, La Mente Absorbente del Niño).

Las matemáticas son de las áreas más interesantes para desarrollar desde la perspectiva de la pedagogía Montessoriana, puesto que, cuando nos hablan de estas, pareciera que únicamente dichos conceptos se asocian a operaciones como la suma, la resta, la multiplicación, la división y la resolución de problemas a través de ecuaciones o procedimientos que pueden parecer aislados para la mayoría de las personas del común. Sin embargo, están presentes en nuestro día a día, y asimismo van mucho más allá de aquellas operaciones, dado que la vida cotidiana está llena de particularidades matemáticas o relacionadas con ellas. En este sentido, funciones como mantener la concentración y el equilibrio, hacen parte del desenvolvimiento del niño, y en consecuencia implican el desarrollo de conceptos lógicos.

Sobre este punto, Montessori advertía:

Los resultados que se constatan en nuestros niños contrastan bastante con el hecho de que en general, en las escuelas, las matemáticas son un escollo en vez de una materia atractiva y que a este respecto en la mayor parte de las personas son frecuentes las barreras mentales(Montessori, 1949, La Mente Absorbente del Niño).

En relación con el punto anterior, el aprendizaje de las matemáticas busca el desarrollo de conceptos lógico-matemáticos de suma importancia como la numeración, el conteo y la cantidad, los cuales son abordados desde su propuesta pedagógica, con el apoyo de materiales de entre los que se destacan otros como: los Números de Lija, las Perlas doradas, el Material Multibase y las Tablas de Séguin.

Ahora bien, la Caja de Husos, es un material utilizado en la segunda etapa de educación infantil (entre los 3 y 6 años) que busca la asociación del signo, símbolo o grafía de los números con la cantidad que estos representan en la realidad, a la vez que refuerza la numeración y más importante aún, busca la interpretación del concepto del cero como una cantidad nula, noción de relevancia dentro del proceso de aprendizaje matemático del niño.

Generalmente, está compuesta por una caja rectangular de madera dividida en diez compartimientos numerados entre el 0 y el 9, con 45 husos de madera (palitos de madera) y un cesto pequeño. Aunque también puede encontrarse dividida en dos secciones de cinco compartimientos cada una, como es el caso del ejemplar que reposa en el Museo Pedagógico Colombiano, que está marcado con los números entre el 6 y el 10.

A continuación, se muestra el modelo más conocido de este tipo de material:

Cajas de Husos Montessori. [Fotografía]. Fuente: https://www.mumuchu.com/blog/caja-husos-montessori/

 

Entre los propósitos educativos de la Caja de Husos, destacamos los siguientes: interpretar y aprender la secuencia de símbolos entre el 0 y el 9, a través de la observación; asociar a cada uno de los diez símbolos una cantidad que pueda manipularse manualmente; identificar que además de esos diez no existen más símbolos para representar cantidades; apropiar el concepto del número cero alejándose un poco de lo concreto hacia lo abstracto, buscando que el niño comprenda que el cero no demarca ninguna cantidad; e interiorizar el primer grupo de números decimales, correspondiente a una cifra, entre el 0 y el 9.

En relación con el uso y función pedagógica del material didáctico que comprende nuestra pieza del mes, esta puede resumirse de la siguiente manera: 1) invitar al niño a sentarse junto al adulto frente al material que preferiblemente debe estar en el suelo; 2) sacar los husos de la caja y depositarlos en el cesto; 3) iniciar el acercamiento al material con el concepto del número cero, señalando al niño varias veces su nombre y símbolo, e indicando que para este número no hay husos, para lo cual, el niño tocará con su mano el espacio destinado para el cero y notar que dicho lugar está vacío; 4) posteriormente, se pasa a la zona del número uno, preguntándole si conoce el nombre del símbolo; si no lo conoce, se le explicará, pidiéndole que tome con fuerza un solo huso en sus manos, lo sienta y lo coloque en el lugar correspondiente; 5) se continuará realizando el procedimiento anterior con el resto de los números hasta que la mecánica sea evidente para el niño, y él siga haciéndolo autónomamente; 6) para terminar, al momento de guardar el material y devolver los husos desde cada compartimiento al cesto, es importante indicarle que vuelva a contar desde el número uno hasta el final, verificando que no haya sobrado ni faltado ningún huso.

Al igual que otros materiales didácticos Montessori, el elemento reseñado, tiene un carácter autocorrectivo, de esta manera el niño podrá percatarse si comete algún error, sin la necesidad de que un adulto se lo haga notar. Sobre este aspecto, con la Caja de Husos la autocorrección se evidencia hasta finalizar el ejercicio, donde él mismo podrá advertir, si hicieron falta husos para completar los espacios o si por el contario sobraron, notando de este modo, si alguno de los compartimientos no tiene el número correcto de husos. Herramientas como estas, permiten a los niños convertirse en sus propios maestros, orientando el desarrollo de todas y cada una de sus capacidades, creando conciencia y sentido de autonomía, iniciativa e independencia para sus procesos de aprendizaje.

Como información curiosa, paradójicamente hoy en día, los ambientes y materiales Montessori tienen un costo realmente elevado, siendo una contradicción para el origen ‘social’ del método y sus diferentes materiales, que surgieron ante el interés y la necesidad de acceso a la educación de los niños pobres y en condición de discapacidad de Roma.

Nuevamente en la conmemoración del Año Montessori en la UPN, resaltamos la importancia y vigencia del trabajo realizado por María Montessori como también del conjunto de materiales creados a partir de sus postulados, los cuales se elaboraron y produjeron masivamente a partir de años de observación, por lo que cada uno está cuidadosamente diseñado, con una función específica y un porqué en la búsqueda de cumplir con un propósito educativo, tanto directo como indirecto. Y ciertamente por la profunda transformación que sus aportes han tenido en el enfoque de la Escuela, visibilizando y resignificando la importancia de la infancia y sus procesos de aprendizaje a nivel mundial.

Para conocer la Caja de Husos, la colección de otros Materiales Didácticos Montessori, otros objetos e implementos escolares de la historia, la memoria y la práctica educativa y pedagógica; y los archivos, textos y manuales pertenecientes a los fondos documentales que salvaguardamos y exhibimos en el Museo Pedagógico Colombiano, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m. en las instalaciones del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

Igualmente los invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales de Facebook: https://www.facebook.com/museopedagogicocolombiano/, Instagram: https://www.instagram.com/museopedagogicoupn/?hl=es, y a explorar nuestra página web: http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/ para visualizar y compartir nuestros contenidos.

 

Palabras clave: Cajas de Husos; María Montessori; Material Didáctico; P. Johannes Müller; Escuela Activa; Segunda Misión Pedagógica Alemana; Matemáticas; Infancia; Maestros; Museo Pedagógico Colombiano.

 

Referencias

Catálogo general del Museo Pedagógico Colombiano. (2017). Sin publicar

De Stefano, C. (2020). El niño es el maestro. Vida de María Montessori. Barcelona. Editorial Lumen.

Montessori, M. (1950). El método de la pedagogía científica aplicado a la educación de la infancia. Barcelona: Biblioteca Nueva.

Montessori, M. (1907). Palabras inauguración Casas dei Bambini. España: Blog Montessori para todos. Desde: https://montessoriparatodos.es/blog/casa-dei-bambini-san-lorenzo-1907-montessori/

Asociación Montessori Española (2020). Biografía de María Montessori. Fecha de consulta: 11 Mar. 2022. Desde: http://asociacionmontessori.net/biografia/

montessoridemetepec.edu.mx. (2020). 6 de enero de 1907: Abre la primera Casa de los Niños – Montessori de Metepec. Fecha de consulta: 7 Jun. 2022. Desde: http://montessoridemetepec.edu.mx/6-de-enero-de-1907-abre-la-primera-casa-de-los-ninos/

BBC News Mundo. (2020). La paradójica vida de María Montessori, la creadora de un método educativo para niños desfavorecidos que terminó convertido en un sistema para ricos. Fecha de consulta: 6 Jun. 2022. Desde: https://www.bbc.com/mundo/noticias-53949706

vsamerica.com. (sin fecha). VS | Chronicle | School furniture and office furniture direct from the manufacturer. (Crónica | Mobiliario escolar y mobiliario de oficina directo del fabricante). Fecha de consulta: 13 Jun. 2022. Desde: https://vsamerica.com/chronik  

vs-furniture.ae/en/. (sin fecha). VS | Chronicle | One part of the history. (Crónica / Una parte de la historia). Fecha de consulta: 13 Jun. 2022. Desde: http://www.vs-furniture.ae/chronik/en

vs.de/en/. (sin fecha). VS | The School Museum | Historic school furniture | Montessori | Furniture and learning materials for a different kind of school. VS and Montessori education. (El Museo Escolar | Mobiliario escolar histórico | Montessori | Mobiliario y material didáctico para una escuela diferente. VS y educación Montessori). Fecha de consulta: 13 Jun. 2022. Desde: https://www.vs.de/montessori/en/

Santibañez, N. (2020). www.tuguiamontessori.com. La caja de husos Montessori, ¿en qué consiste este material? Fecha de consulta: 7 Jun. 2022. Desde: https://www.tuguiamontessori.com/la-caja-de-husos-montessori/

Magaña, T. (2021). www.escuela.bitacoras.com. La importancia de estimular la inteligencia lógico-matemática de los niños. Fecha de consulta: 8 Jun. 2022. Desde: https://escuela.bitacoras.com/2018/12/21/la-importancia-de-estimular-la-inteligencia-logico-matematica-de-los-ninos/#:~:text=%22Los%20objetos%20matem%C3%A1ticos%20no%20est%C3%A1n,posterior%20desarrollo%20mental%22%2C%20alert%C3%B3.

www.mumuchu.com/blog. La caja de husos Montessori, un material del área de Matemáticas. Fecha de consulta: 8 Jun. 2022. Desde: https://www.mumuchu.com/blog/caja-husos-montessori/

portalebambini.it (2019). Il bambino e’ una sorgente d’amore (El niño es fuente de amor). Fecha de consulta: 10 Jun. 2022. Desde: https://portalebambini.it/il-bambino-e-una-sorgente-damore/#:~:text=Il%20bambino%20%C3%A8%20una%20sorgente,di%20unione%20fra%20gli%20uomini.

Pieza del mes de mayo de 2022: Examen de admisión IPN para Señoritas de 1927.

Como pieza del mes, hemos elegido el ‘Examen de Admisión del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, que hace parte de la colección de archivos y documentos que pertenecen al Fondo IPN del Museo Pedagógico Colombiano, el cual fue aplicado inicialmente en 1927 como uno de los requisitos para el ingreso del primer grupo de mujeres aspirantes a obtener el grado de maestras de escuela inferior, superior y normal, en el marco del inicio de labores académicas del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas –IPN para Señoritas–. En este orden de ideas: ¿tuviste que presentar algún examen de admisión para el colegio o universidad?, ¿cómo era su estructura y cuáles eran algunas de las preguntas? y, ¿en qué área tu desempeño era mejor?

Para entender el lugar que ocupó el examen en el marco de la estructura misional y de funcionamiento del antiguo IPN para Señoritas, es fundamental establecer su contexto, que se ubica en las disposiciones gubernamentales del Artículo 1° de la Ley 25 de 1917 “sobre Institutos Pedagógicos Nacionales”:

Habrá en la capital de la República un Instituto Pedagógico Nacional para Institutores y otro para Institutoras, donde se eduquen en la ciencia pedagógica maestros y maestras de escuela inferior, superior y normal, y profesores aptos para la enseñanza didáctica y para la dirección e inspección de la enseñanza pública nacional” (Ley 25 de 1917. Sobre Institutos Pedagógicos Nacionales. Diario Oficial. Año LIII. No. 16239. 9, noviembre, 1917).

Las cuales se materializaron con la construcción del edificio y la apertura de la institución femenina el 9 de marzo de 1927 en la ciudad de Bogotá, y por supuesto la presencia de la Segunda Misión Pedagógica Alemana (1924–1926), en cuyo seno se estableció la estructura académica, el pensum y el reglamento del IPN para Señoritas, redactados por el equipo de docentes y educadores liderados por Franzisca Radke, primera rectora del Instituto; quienes con apoyo del Gobierno Conservador de la época posibilitaron al conocimiento y ciencias de la educación otras formas de aplicación en los métodos de enseñanza y aprendizaje, que apuntaban a la modernización de las prácticas de formación de maestras de Colombia.

Establecida la necesidad de crear dos Institutos Pedagógicos Nacionales para institutores en Bogotá, uno masculino y otro femenino con el objetivo de formar maestros y maestras en las lógicas de la modernidad y el contexto. Fue hasta el 29 de abril de 1929 con la instalación de la luz por parte de la empresa de energía, cuando el grupo de docentes alemanes y maestros colombianos lograron implementar en condiciones realmente dignas y de comodidad, las propuestas y recomendaciones de la Misión, para que la educación colombiana estuviera en diálogo con su contexto desde la práctica como experiencia, evitando los procesos memorísticos, y cambiando el rol de la mujer en la educación, dándole la posibilidad para que se educaran en asignaturas a las que anteriormente por su género no podían acceder.

Al respecto, Radke mencionaba sobre la apertura del IPN para Señoritas:

“[…] se abrió el 9 de marzo de 1927, sin luz, sin agua, ni mobiliario. Se dormía sobre colchones colocados en el suelo; la noche se alumbraba con esperma y más tarde con lámparas de petróleo; la Avenida Chile estaba sin urbanizar, y el mismo barrio de Chapinero tan lejos de Bogotá, como cualquier otra ciudad. Un arca de piedra con las puertas abiertas, sin tapia, reja ni protección […]fue el principio del Instituto Pedagógico, por cierto, principio poco lujoso […]” (Radke, 1936, p.13)[1].

[1] Radke, F. (1936). Historia del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, desde 1927 hasta 1935. pág. 13

La participación de la Segunda Misión Alemana aporto al sistema educativo colombiano, la profesionalización de maestros, profesores y la fundación de la carrera docente a nivel universitario; sus contribuciones fueron significativas para la historia de la formación docente y la construcción de la memoria pedagógica del país.

La intervención del equipo alemán en Colombia durante la Segunda Misión Pedagógica en el marco político del final de la ‘Hegemonía Conservadora’ (1900–1930) se enfocó en el carácter político de las ideas impartidas en la escuela, reformulando la Ley de Instrucción Pública existente hasta la época, para reformar la educación normalista y reestructurar la formación de maestros[2].

[2] Publicación de MUSEO PEDAGOGICO COLOMBIANO – UPN (Sept-2019). Fuente: http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/2019/09/16/pieza-del-mes-de-septiembre-de-2019-fotografia-de-franzisca-radke/

El Instituto iniciaría actividades académicas, con 69 estudiantes de diferentes regiones del país (Boyacá, Cundinamarca, Huila, Meta, Norte de Santander, Santander del Sur y Tolima) repartidas en 3 cursos, de este grupo, 31 fueron trasladadas directamente desde la Escuela Normal del Estado de Cundinamarca y, las 38 (futuras maestras) restantes, fueron las elegidas después de la presentación del examen de admisión que comprende nuestra pieza del mes.

En consecuencia, entre diciembre de 1926 y marzo de 1927, se presentaron 131 candidatas quienes presentaron el primer examen de admisión de manera escrita, el cual incluyó diferentes áreas del conocimiento, y varios tests de la Colección Termán, una herramienta creada por los psicólogos estadounidenses Lewis Madison Terman (1877–1956) y Maud Amanda Merril (1888–1978) en 1916, orientada a medir el coeficiente intelectual y el grado de aprendizaje de sujetos que tenían un mínimo nivel escolar, su estructura permitió analizar distintas áreas del conocimiento para determinar en qué nivel estaba la memoria a largo plazo, el sentido común, el vocabulario, la síntesis o selección lógica, la aritmética o concentración, el análisis, abstracción, planeación y organización de la información.

El examen quiso incluir todas las áreas del conocimiento sin importar la categoría: Redacción, Dictado Ortográfico, Matemáticas, Historia Patria, Geografía Patria, y religión. En ese orden de ideas, los cuestionarios de aquel examen divididos por áreas fueron los siguientes:

Un Dictado Ortográfico sobre el vuelo de un aeroplano; en Redacción se proponía redactar un texto que hablara sobre la experiencia de desplazamiento de las estudiantes a la ciudad, llamado: “Mi viaje a Bogotá”; en Religión eran varias preguntas sobre los misterios y verdades del catolicismo, los mandamientos, figuras religiosas representativas, la Oración y sus usos; en Aritmética se formulaban 8 ejercicios de suma, resta, multiplicación, división, fraccionarios, conversión de unidades y algunos problemas de lógica matemática; en Geografía las preguntas estaban orientadas al territorio colombiano, el dibujo del croquis, el  reconocimiento de las áreas de producción industrial, nombrar los ríos de un departamento específico, describir la región (ya separada desde 1903) de Panamá y mencionar las características de diversas regiones como Florencia, Quibdó, la Sierra Nevada de Santa Marta y el Orinoco; y por último, en el área de Historia, había que describir personajes históricos como los Chibchas, Cristóbal Colón, Francisco de Paula Santander, Antonio José de Sucre, Policarpa Salavarrieta, Tomás Cipriano Mosquera, y el periodo de la Colonia.

Esta era la descripción del examen de admisión que las candidatas a Institutoras tuvieron que presentar en aquella época; que incluso, a la luz de la formación académica que se recibe actualmente en primaria y secundaria, se podría concebir como una prueba de conocimiento que no debería tener mayor dificultad. No obstante, como ya se enunció anteriormente, solo 38 aspirantes pasaron la prueba, pero con puntajes realmente bajos a los esperados, resultados que representaron un antecedente en la historia de la educación del país, ya que, si bien el Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, simbolizó la oportunidad para muchas mujeres de acceder a la educación formal, por otro lado, expuso con preocupación otra realidad, los niveles de escolaridad e intelecto en comparación con los hombres.

Ante este panorama, los resultados generales de los puntajes no superaron los 440 puntos, cuando el resultado ideal obtenido por miles de alumnos adolescentes entre los 13 y 14 años, era de 1400. Pese a dicha realidad, se aceptaron los mejores puntajes considerando que los resultados no se debían a la falta de capacidad intelectual de las candidatas, sino que por el contrario no estaban acostumbradas a este tipo de exámenes. Justamente sobre este asunto, Francisca Radke comentaba sus apreciaciones sobre las entrevistas a las aspirantes:

se podía dar cuenta que las candidatas venían de un sistema educativo deficiente, pues a su juicio, se habían formado en escuelas con locales inadecuados, que carecían de materiales didácticos aptos para su enseñanza y con unos métodos que enfatizaban en la memorización” (Prieto, 1997, p. 5).

Ahora bien, es importante precisar algunos aspectos sobre la implementación y transformación del examen en Colombia en la primera mitad del siglo XX, para comprender bajo que parámetros se realizaban y con qué objetivos.

En este sentido, de acuerdo la investigación de maestría: “De hombre memorable a sujeto calculable: aproximación a una historia del examen escolar en Colombia 1870-1930”, realizada por Ania Quintero, se exponen dos premisas importantes en relación con nuestra pieza del mes, la primera está planteada en la tesis doctoral: “El peso de la tradición: evaluación educativa y cultura en Colombia. 1900–1968”, desarrollada por José Guillermo Ortiz (2012) donde la revisión sobre el examen se articula a los conceptos de clasificación social, evolucionismo y positivismo, como antecedente de la evaluación en Colombia; y la segunda es la correlación entre el desarrollo de la clase media en Colombia y la función selectiva que surge al diseñar y aplicar un examen de selección para el ingreso a la educación superior en una institución que apenas estaba iniciando labores; indudablemente el examen parecía estar articulado con la clasificación social.

Por otra parte, en el Capítulo III. Exámenes – Exámenes de Admisión del documento redactado por Radke en 1932: “Pensum – Programa y Reglamento del Instituto Pedagógico Nacional Para Señoritas”, se describía el proceso de propuesta y calificación del examen de admisión, las materias a evaluar de forma escrita y oral, los tiempos de presentación, y también, las advertencias frente a las trampas, así se enunciaba en el Artículo 12 del documento:

Los catedráticos presentarán a la Directora tres temas o problemas de sus asignaturas respectivas. Estos temas o problemas deben dirigirse principalmente a la inteligencia, y evitar todo aquello que sea exclusivamente de memoria. De estos la Directora escogerá el que le parezca más conveniente y lo dará al catedrático inmediatamente antes del examen, a fin de que él lo presente a las alumnas” (Radke, 1932, p. 126).

Entonces, una vez presentado el examen y luego de las tareas propias de revisión y calificación, el Jurado Calificador –que era nombrado de acuerdo con el Ministerio de Educación y presidido por el Instituto–, escogía tres grupos de acuerdo con los puntajes: 1. ° Aspirantes que pueden ser admitidas, 2. ° Regulares, y 3. ° Condicionales, refiriéndose a aquellas aspirantes que en unas materias no estaban suficientemente preparadas, pero que en otras eran muy buenas.

Sobre la metodología, el examen tenía dos partes, la aplicación escrita que comprendía: redacción, dictado ortográfico, matemáticas, religión, historia patria y geografía patria; y la que se presentaba de forma oral: sobre castellano y matemáticas, que solo se presentaba cuando las calificaciones en redacción, dictado y matemáticas fueran dudosas. De esta manera, la prueba escrita duraba 160 minutos, mientras que el examen oral, 7 minutos por cada materia.

Por último, el reglamento manifestaba en el Artículo 18 – Parágrafo IV, aspectos concernientes a ‘la copia’:

Las alumnas que durante el examen se comuniquen mutuamente sus conocimientos, o que de alguna u otra forma perjudiquen la severidad y rectitud que se debe guardar en él, serán castigadas con el retiro inmediato del examen en esta asignatura. Si la falta fuere de tal naturaleza que merezca un castigo mayor, no podrán presentar el resto de los exámenes o serán retiradas definitivamente del Instituto” (Radke, 1932, p. 129).

Como dato notable, de las 69 alumnas aspirantes que ingresaron en el año de apertura del Instituto, únicamente 15 de ellas obtuvieron el título como maestras el 5 de noviembre de 1929, representando escasamente el 21.7% de mujeres graduadas en la primera promoción.

Además, en una nota de prensa publicada por el periódico El Tiempo el 12 de marzo de 1977, sobre la conmemoración de los 50 años de la inauguración del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, su autora Gloria Helena Rey[3], curiosamente la titulaba: “¡Se ‘rajaron’ casi todas!”, haciendo alusión al ‘fracaso colectivo’ que representaron los resultados ‘casi vergonzosos’ del primer examen de admisión realizado; igualmente, destacaba los tímidos pasos con que la mujer iniciaba en aquella época su devenir por la igualdad de oportunidades para el acceso a la educación, la forma en que la formación y los contenidos que se impartían en ese momento marcaban la brecha entre mujeres y hombre, y como esta realidad establecía una barrera cultural entre los dos géneros.

[3] Primera mujer ganadora de un Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar en 1978 con el artículo “La otra cara de Bogotá”.

Y por supuesto, recordaba algunos aspectos sobre el contexto, la planta docente inicial, el vínculo con Alemania, su primera rectora, el pasado histórico, la trayectoria hasta la fecha, la vida escolar y las prácticas pedagógicas (algunas pioneras) que se desarrollaban al interior del IPN para Señoritas; y, por último, recogía algunas memorias, experiencias y percepciones de estudiantes, docentes y directores del Instituto acerca de la conmemoración de los 50 años de la institución, que se celebraban a finales de la década de los 70’s.

Rey, G. (12 de marzo de 1977). Hace 50 años en el Instituto Pedagógico, ¡Se ‘rajaron’ casi todas! El Tiempo [Nota de prensa]. Fuente: Fondo IPN del Museo Pedagógico Colombiano.

Para finalizar, destacamos el legado del primer Examen de Admisión del IPN para Señoritas, como parte de los archivos históricos del antiguo Instituto Pedagógico Nacional, puesto que, conforman una de las fuentes primarias y documentales que nos ayudan a comprender la historia y trayectoria de la Universidad Pedagógica Nacional en el ámbito educativo colombiano; a rastrear la historia del examen escolar dentro del sistema escolar del país; y evidentemente, a comprender y esclarecer los procesos de lucha de la mujer que garantizaron su acceso a otras oportunidades educativas y académicas para la formación pedagógica cualificada como maestras, que, entre otras cosas, permitió la reivindicación de la mujer –ciudadana– como sujeto político y activo, el desarrollo de su pensamiento crítico, y el acceso a otras disciplinas del conocimiento, que antes se consideraban vedadas para ellas.

Por otra parte, resaltamos la importancia de los Fondos Documentales Bibliográficos (archivos periodísticos, manuales y libros), en razón de que su conservación, cuidado y difusión, es clave para la reconstrucción y preservación de las memorias que entretejen la historia de la educación en Colombia y el papel fundamental que en esta evolución ha tenido la Universidad Pedagógica Nacional y su precedente anterior, el IPN para Señoritas.

Para conocer y consultar el Examen de Admisión del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, otros documentos sobre la historia del IPN; otros textos, manuales de alfabetización y demás archivos pertenecientes al fondo documental; y también los objetos e implementos escolares de la historia y la práctica pedagógica que salvaguardamos y exhibimos en el Museo Pedagógico Colombiano, convocamos a la comunidad de la Universidad Pedagógica Nacional, estudiantes, egresados, investigadores, docentes, administrativos y miembros externos de la comunidad académica, colectivos pedagógicos y a todas las personas interesadas en conocernos, apoyarnos y difundir nuestras labores, a visitarnos de lunes a viernes entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m.  en las del Museo ubicadas en Bogotá en la calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) en el Centro Cultural ‘Paulo Freire’ de la Universidad Pedagógica Nacional.

Igualmente los invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales Facebook: https://www.facebook.com/museopedagogicocolombiano/, Instagram: https://www.instagram.com/museopedagogicoupn/?hl=es, y a explorar nuestra página web http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/ para visualizar y compartir nuestros contenidos.

 

Palabras clave: Examen de Admisión; Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas; Franzisca Radke; Segunda Misión Pedagógica Alemana; Formación de Maestras; Mujer e Historia de la Educación; Maestras; Museo Pedagógico Colombiano.

 

Referencias:

Radke, F. (1936). Historia del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas, desde 1927 hasta 1935. Bogotá: Editorial El Gráfico.

Museo Pedagógico Colombiano. Pieza del mes de septiembre de 2019: Fotografía de Francisca Radke. 2019. Bogotá. Recuperado de:  http://museopedagogico.pedagogica.edu.co/2019/09/16/pieza-del-mes-de-septiembre-de-2019-fotografia-de-franzisca-radke/

Quintero. A. (2017). De hombre memorable a sujeto calculable: aproximación a una historia del examen escolar en Colombia 1870–1930. Universidad Pedagógica Nacional. Bogotá.

Prieto. V. (1997). El Instituto Pedagógico Nacional y la educación de la mujer. No. 34 (1927-1936). Universidades Incca de Colombia y Libre. Bogotá. Recuperado de: https://revistas.pedagogica.edu.co/index.php/RCE/article/view/5417/4444

Ruiz. L. Psicología y Mente. Articulo Test de Terman Merril: qué es y qué partes y pruebas contiene. Publicación en blog. Recuperado de: https://psicologiaymente.com/inteligencia/test-terman-merril

Aristizabal. M. (2011). Premio Simón Bolívar de Periodismo: Cuatro décadas de periodismo colombiano. p. 19. Recuperado de: https://repository.urosario.edu.co/bitstream/handle/10336/2283/AristizabalGarcia-Diana-2011.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Radke, F. (1932). Pensum – Programa y Reglamento del Instituto Pedagógico de Señoritas. Escuela Tipográfica Salesiana – Bogotá.

 

Pieza Audiovisual – Campaña de Donación de Objetos y Documentos 2022-I: «Tus recuerdos escolares en el Museo…»

Estimados/as colegas, lectores y visitantes, compartimos la pieza audiovisual realizada con apoyo de La Pedagógica Radio, para la difusión de la «Campaña de Donación de Objetos y Documentos – Tus recuerdos escolares en el Museo», la cual tiene el objetivo de ampliar la colección de materiales, objetos y fondos documentales, y asimismo consolidar la memoria material del Museo Pedagógico Colombiano, la cual tendrá una duración de tiempo entre el 2 de mayo y el 10 de Junio de 2022.

La recepción de los elementos se hará entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m., en las instalaciones del Museo Pedagógico Colombiano, ubicado en Calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) Centro Cultural ‘Paulo Freire’.

¡Esperamos sus Aportes!

Campaña de Donación de Objetos y Documentos 2022-I: «Tus recuerdos escolares en el Museo…»

Estimados/as colegas, lectores y visitantes, compartimos la información sobre el lanzamiento de la «Campaña de Donación de Objetos y Documentos – Tus recuerdos escolares en el Museo«, la cual se realizará con el objetivo de ampliar la colección de materiales, objetos y fondos documentales, y asimismo consolidar la memoria material del Museo Pedagógico Colombiano, la cual tendrá una duración de tiempo entre el 2 de mayo y el 10 de Junio de 2022.

Se recibirán: Manuales Escolares, Textos, Libros; Implementos antiguos de uso en la Enseñanza y Vida Escolar; Cuadernos; Material Científico; Juguetes; Material Didáctico; Fotografías antiguas; Documentos y Elementos relacionados con la Memoria e Historia del antiguo Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas y la Universidad Pedagógica Nacional, los cuales abarcaran un marco de tiempo a partir del siglo XIX y hasta 1965.

La recepción de los elementos se hará entre 8:00 a.m. y 5:00 p.m., en las instalaciones del Museo Pedagógico Colombiano, ubicado en Calle 72 N.º 11 – 86 (Edificio ‘E’) Centro Cultural ‘Paulo Freire’.

¡Esperamos sus Aportes!